Mujeres líderes de la Iglesia visitan a mujeres líderes de gobierno en Argentina y Paraguay

"Nuestra Iglesia desea poder trabajar con Uds. y ayudar a mejorar las oportunidades de educación y autosuficiencia de las mujeres en su comunidad ", declaró recientemente la presidenta Camille N. Johnson, Presidenta General de la Sociedad de Socorro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, en una reunión con Celina Lezcano, Ministra de la Mujer del gobierno de Paraguay. Un diálogo similar tuvo lugar con Claudia Martínez, Ministra de la Mujer del gobierno de Córdoba. En estas visitas se unieron el presidente del Área Sudamérica Sur, Craig C. Christensen, y su esposa Debbie en Paraguay, y la autoridad general, el setenta, Alan R. Walker, y su esposa Inés, en Argentina.

La presidenta Johnson junto a Susan H. Porter, Presidenta General de la Primaria se reunieron con estas dos líderes gubernamentales quienes son responsables de administrar los servicios públicos que brindan apoyo, oportunidades de educacion y autosuficiencia a mujeres en situaciones vulnerables y a sus hijos.Tanto la ministra Lezcano como la ministra Martinez reconocieron el compromiso de la Iglesia con las mujeres, sus comunidades y los problemas sociales que las afectan directamente.

"La presencia de su Iglesia en cada rincón de nuestra provincia los convierte en un aliado ideal y vemos con mucho interés la oportunidad de colaborar en los esfuerzos para ayudar y proteger a las mujeres," comentó la ministra Claudia Martínez. La presidenta Johnson y presidenta Porter quedaron impresionadas al recorrer juntas el Polo Integral de la Mujer. Este espacio fue creado en 2019 para asistir a mujeres víctimas de violencia doméstica y cuenta con un área segura para las mujeres, asesoramiento legal inmediato, servicios para niños y también programas de rehabilitación.

 Además de las reuniones que mantuvieron con los entes gubernamentales, las líderes de la Iglesia también se reunieron con padres jóvenes, con hermanas solteras y participaron de visitas a familias con niños. Asimismo, mantuvieron capacitaciones para líderes de barrios y estacas. En estos eventos, asistieron Craig C. Christensen, el élder Joaquin E. Costa y el élder Alan R. Walker y sus esposas. También asistieron varias Asesoras Organizacionales de Área que apoyan a la Presidencia de Área.

En una reunión con padres e hijos, la presidenta Porter pasó tiempo visitando a niños. Al observar sus interacciones, uno podía sentir el amor del Salvador. Invitó a los niños a compartir cómo podrían traer a otros a Jesucristo. “Nuestro Padre Celestial los ama. Él sabe tu nombre y cuáles son tus desafíos. Él necesita que acudan a Él en oración”, enseñó la presidenta Porter.

En una reunión para empleados de la Iglesia, la presidenta Porter luego compartió su experiencia de ayudar a su esposo con sus problemas de salud durante diez años antes de su fallecimiento. Dijo que “muchas veces lo que hacemos no es visto ni conocido por los demás. Sin embargo, Dios lo sabe y nos bendice cuando servimos de manera tranquila e invisible”.

En otra reunión, la presidenta Johnson compartió que mientras prestaba servicio con su esposo como líderes misionales en la Misión Arequipa, Perú, una de sus hermanas misioneras sufrió lo que percibió como un revés desafortunado, al que siguieron milagros imprevistos. Comentó que “la fe en Jesucristo produce milagros y muchas veces no son los milagros que esperamos”. Agregó que el Señor nos conoce y nos ama individualmente a cada uno de nosotros, la presidenta Johnson y aquella hermana misionera tuvieron un gozoso reencuentro debido que reside en la estaca donde la presidenta Johnson fue programado visitar.

Hablando con las mujeres líderes locales de la Iglesia, la presidenta Johnson hizo la pregunta: "¿Cómo sienten el amor del Salvador? Luego, ella compartió un hermoso concepto llamado “El Círculo del Amor”. "Cuando muestras amor a tus hermanas, ellas se sienten el amor de Dios. Aman a Dios y se asocian con Él para amar a sus hijos... que luego sienten su amor". Ella continuó, preguntando "¿Cuan grande es tu círculo de amor?", desafiándolas a expandir su círculo de amor a todos los hijos de Dios.